Uno de los mayores atractivos del Domingo del Carnaval de Oruro, es sin duda la presencia de la "diablura" del Club Sogalbe, que por varios años se encargó de satirizar la usurpación de la danza de la diablada sobre todo en Chile. Pero esta gestión puso mayor énfasis en la mala imitación de los puneños al a Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Con carteles que manifestaban la molestia de la mayoría de los bolivianos, como "Abajo la diablada de Puno", además haciendo mofa de la diablada puneña con la introducción de personajes que no tienen cabida en la especialidad, como sucede en la festividad del vecino país.
La participación e la Diablura Chilena nació partir de 1976, cuando varios jóvenes que vivían en inmediaciones de las calles Soria Galvarro y Belzu, de ahí nace su nombre, el acrónimo "Sogalbe", se organizan y deciden participar en el Carnaval de Oruro, mostrando al público su expresión de protesta a través de la sátira.
La satírica "diablura" del Club Sogalbe, todos los domingos de Carnaval, presenta pasos y disfraces fuera del contexto de la esencia misma de la Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, pero en defensa del origen de la Diablada de Oruro, tal como lo hizo este año con la participación de cientos de jóvenes que ingeniosamente hicieron dar cuenta de la mala imitación que se cumple en vecinos países.
Otro de los aspectos que fueron recriminados por los entusiastas jóvenes, fue la participación de bandas bolivianas en la fiesta puneña, además de recordarse de la lucha incansable de querer recuperar la salida soberana al mar.